lunes, 14 de septiembre de 2015

¿Vos no serás de esas que andan con el látigo entre las sábanas?


  Un excelente artículo de Mistress Roxy que merece ser leído. Aquí solamente compartiré la primera parte, pero al final tendrán el acceso al texto completo.
¿Vos no serás de esas que andan con el látigo entre las sábanas?
  La pregunta aterriza en la mesa cual meteorito eyectado de un planeta perdido y árido en donde habita un amigo vainilla de mi sumiso esposo al que solemos ver en algunas reuniones de amigos y que suele soltar la lengua cuando toma una que otra copa de más. Me sonrío con cara de poker y la cosa queda ahí.
  Es muy evidente que su deseo sería estar bajo esas sábanas y al calor del látigo al que se refería en su inoportuna y espontánea pregunta. Su esposa de toda la vida lo mira con ganas de asesinarlo mientras el pobre, sin darse cuenta de la reprimenda que le espera cuando llegue a su casa, no puede sacar la vista de mis botas Carmen Steffens, mientras sigue esperando una respuesta qué decido no darle. Vuelvo a sonreír y no dejo de cruzar las piernas para lucir el largo de la caña y los tacones más las cremalleras doradas que parecen reflejar todas las luces del salón.
  Si alguien quiere saber sobre sexo, que le pregunte a la persona con quien comparte su vida. Mi sumiso no me construye castillos para que yo me dedique a vender recetas de sexo ni terapias de pareja sino para gozar. Estoy enfocada en mi placer y ese placer no tiene ninguna relación con orientar las coordenadas de un infantiloide sexual. Me gusta cazar pero prefiero el anonimato del bosque y me gusta mucho más acechar a tiernos inexpertos que a pretendidos preguntones.
  La dominación femenina no es un juego de roles de donde entro y salgo; es mi vida erótica. Mi estética, la que tantas preguntas convoca, es parte de esa vida erótica: lo siento si a alguien avivo de más, no es mi intención excitar a los deserotizados. Mi intención es vivir excitada. Fantaseo con toda clase de  atrocidades y perversiones  que para la media de la sociedad serían un salto al vacío de la degeneración. Conforme al diccionario un degenerado es quien se considera fuera de lo normal o de lo moralmente aceptado en el terreno sexual.  Yo me pregunto: ¿Qué fantasía erótica está basada en la norma y en la moral aceptada?


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