¿Por qué me siento impulsado a escribir?

  Creo que son variadas las razones por las cuales me veo motivado a escribir. La mayor parte de mis escritos tienen como principal propósito el de plasmar y preservar una experiencia, un sentimiento, o una fantasía lo más rápido posible luego de que esta se produce. Para evitar de esta forma que se diluya con el correr del tiempo.
  Al principio no lo consideré importante, pero con la velocidad en la que a veces se van produciendo los cambios en la vida, no nos damos cuenta que fuimos transportados muy lejos de donde estábamos apenas un par de años atrás. Las calles, las caras, los aromas y sabores que nos parecían tan rutinarios por tanto tiempo, hoy ya no son más que un recuerdo solamente. El viaje diario al trabajo en tren o colectivo, los almuerzos con los compañeros, las salidas y cenas con amigos, los lugares y las personas con las que hicimos el amor y que hoy ya no están a nuestro lado.    
  Muchas veces cuando repaso mis memorias o las cartas que intercambié con determinadas personas muy allegadas afectivamente, me viene una profunda valoración de esos testimonios. Por suerte en muchos casos hay fotos o vídeos que hacen más fácil transportarnos a aquellos momentos de alegría, dicha, placer y felicidad.   
  Por supuesto que no me considero en lo absoluto un escritor, ni un poeta, ni cosa por el estilo. Me falta toda la formación profesional para serlo. Simplemente soy una persona común y corriente que cuando tiene un momento libre, agarra un editor de textos y empieza a escribir sobre las cosas que me interesan o considero dignas de compartir con todos ustedes. Tal como lo estoy haciendo ahora.
  Pero todo esto comenzó, cuando por sugerencia de Mi Reina me propuso crear un Blog donde poder plasmar lo que en principio era exclusivo para ella, luego vinieron las investigaciones sobre FemDom, tratar de contactar con otras personas de la movida. Proceso que llevó su buen tiempo al principio, aprender nuevas terminologías, esperar por varios días la respuesta a un mensaje privado, participar de eventos, conocer gente del BDSM. Todo este cocktail en su conjunto fue una experiencia muy enriquecedora.
  En el Blog se ven grandes períodos de silencio, muchos de ellos se deben a momentos de investigación y lectura, otros fueron de meditación y reconstrucción. Las obligaciones y demandas familiares muchas veces conspiraron en que no tuviera la privacidad o la tranquilidad necesaria para ponerme a escribir. Pero cuando todo se conjugaba bien y me permitía un tiempo para mí. Abría el Blogger y me ponía a escribir, esto lo hice estando colmado de dicha y felicidad, como así también cuando estuve en los momentos más duros y sombrios de mi vida.
  Interiormente sé que cada uno de esos capítulos poco a poco van concluyendo el Gran Libro que testifica mi paso por este mundo, tanto del FemDom, como del terrenal propiamente dicho. También son una forma de dar las gracias, a Mi Reina y a las demás mujeres que estuvieron cerca brindándome todo su amor, apoyo y contención. En todo lo referido al amor, las pasiones o la amistad, no hay manera material en la que puedan medirse, pero sí existen maneras de demostrarlo, y es mediante los hechos, con un gesto, estando cerca, leyendo o escuchando, buscando palabras agradables y mostrando abiertamente nuestros sentimientos. Considero que ese ida y vuelta es el espíritu de este Blog.

  Ahora para fortalecer la idea de esta publicación, se me ocurrió investigar por qué se les dio a otras personas por escribir y a continuación detallaré brevemente sus respuestas:

• Rubén Fonseca: afirma que el amor por la imaginación (soñar, inventar ideas, fabular) lo llevó al amor por la lectura y que el amor por la lectura lo llevó al amor por la escritura y tuvo deseos de crear todo aquello que admiraba.
• Allen Ginsberg: escribía porque le gustaba cantar cuando estaba solo, no tenía ninguna razón, no tenía un por qué hacerlo. Era la mejor manera de expresar todo lo que le venía a la mente.
• Gabriel García Márquez: dijo que escribía para que sus amigos lo quisieran más.
• Jorge Luis Borges: Se escribe para jugar ¿Por qué no? La palabra es un juguete, el más serio, el más fatuo, el más caritativo de los juguetes de adulto. Escribo porque siento que cumplo una función que es necesaria para mí, si no escribo siento desventura y remordimiento, dijo.
• Umberto Eco: dijo que sus hijos habían crecido y ya no sabía a quién contarle sus historias.
• Tomás Borge: escribir es como hacer el amor, y escribir un primer libro es como hacer el amor por primera vez. Nadie soportaría la tentación de seguir haciéndolo hasta la consumación de los siglos.
• Gesualdo Bufalino: escribió para vencer dentro de sí mismo la amnesia, pero que también escribía para ser feliz.
• Alexandre Kouchener: escribía porque en ello encontraba placer y alegría.
• Henry Miller: dijo, que el escribir es como la vida misma, es un viaje de descubrimiento y todo lo que hace, lo hace por la mera alegría de hacerlo. No le preocupa que lo entiendan el lector corriente, ni el crítico y tan pronto como oyó su propia voz quedó encantado, y el hecho de que fuera una voz diferente y distinta a todas las demás, lo sostuvieron.
• Graham Greene: escribía por pura necesidad, porque si tenía un forúnculo y estaba maduro, tenía que apretarlo.
• Wole Soyinka: dijo que suponía que era su lado masoquista.
• Rafael Alberti: escribía para comunicarse lo más claramente posible con aquellos que lo leían y le escuchaban.
• Germán Espinoza: escribe para justificarse o bien que si llegase a descubrir por qué escribe, dejaría de escribir pero que en honor a la verdad escribe porque en él la fantasía priva sobre la razón.
• José Agustín Goytisolo: dijo que escribir le ha ayudado a vivir, a estar alegre entre tanto desastre y tanta miseria moral, entre tanta mediocridad y cobardía y que uno siempre escribe por carencias profundas, por desequilibrio.
• Juan Marse: escribía novelas por puro placer estético, esto es, para sentirse vivo, para crear criaturas imaginarias, y con la vida que no pudo vivir, conjurar así la nada y el olvido, como una forma de la felicidad, y que escribía para sobrevivir a su infancia y salvar de la nada algunas imágenes, algunos sentimientos y emociones de la infancia.
• Miguel Otero Silva: escribía porque no pudo ser ni concertista, ni pintor, ni abogado, ni ingeniero, ni deportista, ni orador parlamentario, ni senador. La naturaleza no lo había dotado para el ejercicio de las anteriores profesiones y como político sus brillantes discursos solo se le ocurrían cuando ya se había clausurado el debate.
• Cioran: ha escrito para vengarse. Vengarse contra el mundo y contra sí mismo. Casi todo lo que ha escrito fue el producto de una venganza dijo.
• Osvaldo Soriano: lo hacia por placer, buscaba palabras sensuales para crear con libertad un espacio en el Universo. Ese desgaste a veces le producia angustia, pero le servia para compartir su soledad.
• Manuel Vásquez Montalbán: escribía porque quería ser grande, rico y bello.
• Leonardo Sciascia: escribía porque el quería existir además de vivir.
• Jaroslav Seifert: dice que quizás se escribe por ese deseo que existe en cada ser de dejar una huella.

  Reflexionando las razones de estos grandes, uno se da cuenta que el propósito de la escritura debería ser embellecer el mundo envilecido en el que vivimos. A su vez explorar nuevos mundos, construirlos o conquistarlos. Debemos usar el lenguaje para permitirnos seducir, imaginar y delirar con las historias más increíbles que la mente, la realidad o la historia nos dibujan a nuestro alrededor. Nuestras manos deberían escribir con total libertad todo aquello que el corazón nos dicta. Ya lo dijo Albert Einstein "La imaginación es superior al conocimiento".
  Me gustaría concluir con las palabras del gran Garcia Marquez "El deber revolucionario de un escritor es escribir bien y en ese deber está incluido su ética y su estética literaria. No es tampoco un ejercicio de individuos privilegiados, pero si de una sensibilidad distinta al común de todos los hombres, porque no todos los hombres tienen la sensibilidad del lenguaje y su enamoramiento para escribir... Se escribe porque se ama el lenguaje como a una mujer o la vida, y nos alucina y maravilla como la creación más fervorosa del ser humano".