jueves, 17 de abril de 2014

Las etapas personales en el BDSM



  Tratando siempre de informarme o instruirme y al mismo tiempo facilitarles esos conocimientos a todos aquellos que lean o visiten este humilde Blog, me pareció muy interesante compartir y profundizar un poco más el excelente trabajo publicado en el sitio culturabdsm.com el 23 de Febrero del 2013, basado en una recopilación hecha por Lord Sade.
  Partiendo de dicho trabajo y tratando de orientarlo más hacia el FemDom, he decido crear esta guía que será muy generalizada y a su vez acompañada de opiniones personales, por lo que "no" deberán tomarlo como Ley, ni norma aplicable a todos los casos, sino que simplemente trata de ser una herramienta más para que nos puedan conocer o interpretar mejor a quienes elegimos el BDSM y dentro de esas prácticas el FemDom como estilo de vida o práctica de nuestras relaciones íntimas. Será una visión de las etapas, sensaciones o emociones por las que cualquiera de nosotros pasamos al llegar a este mundillo que cada vez cuenta con más practicantes.

ETAPA 1 - La del Descubrimiento
  Es el periodo de tiempo en el que se nos despierta a cualquier edad y por diferentes razones o circunstancias la necesidad de descubrir nuevas sensaciones y emociones. En la gran mayoría de los casos la influencia de la pareja o un tercero suelen ser la causa que nos lleva hasta la puerta del BDSM. Digo hasta la puerta, porque tiene que haber "siempre" una voluntad propia de entrar.
  Por eso mismo recordemos que BDSM justamente el término creado para abarcar un grupo de prácticas y fantasías eróticas. La sigla deriva de las siguientes palabras: "Bondage"; "Disciplina y Dominación"; "Sumisión y Sadismo"; y por último "Masoquismo". Está a la vista que estamos hablando de prácticas y gustos sexuales no convencionales o alternativas, de acuerdo al común de la gente. Estas prácticas se apoyan siempre en el consenso de los participantes y se distinguir radicalmente de cualquier tipo de sadismo criminal.
  Se suele llegar al BDSM en momentos especiales de la persona, en momentos en que la gente suele evaluarse a sí misma, a su pareja, incluso su ambiente. También hay que tomar muy en cuenta el desarrollo sexual de la persona, su posición e interés frente al sexo, su cuerpo y su pareja. Todas estas impresiones no son explícitamente sensaciones BDSM donde las personas ya se crean dominantes o sumisas, pero sí estarían relacionadas.
  Estas sensaciones como dominantes o sumisos pueden existir muy dentro en la naturaleza de las personas o no. En el sentido estricto, no hay persona 100% dominante, ni 100%sumiso. Lo que va a ir desarrollándose son tendencias, hacia uno de los extremos. Aunque tampoco podemos dejar afuera a aquellas personas que se llaman "switch", es decir que tienen un rol cambiante y que les aporta igual placer siendo dominantes o sumisos.
  La intensidad de las sensaciones en los roles como dominantes o sumisos puede ser diferente en cada persona, lo mismo puede llegar a suceder con los miedos y la culpa que se puede llegar a tener y esto dependerá directamente de la educación, la libertad de pensamiento, la creatividad, la familia y la religión.
  Por todo esto podemos decir que esta etapa inicial está normalmente está marcada por la incertidumbre.

ETAPA 2 - La del Miedo
  Como concluimos en el primer punto, la incertidumbre y demás factores sociales conducirán al miedo sobre las sensaciones y emociones. Puede conducir a períodos más cortos o más largos de depresión. Otra vez la religión y la educación son los factores que más influyen aquí, combinadas con los tabúes sociales, los prejuicios, los estereotipos y un déficit substancial en la educación sexual general.
  Las personas que ya se han considerado a si mismo como dominantes o sumisos, en esta etapa pensarán que son el único ser con sensaciones como éstas y es muy común que se repriman y que no quieran hablar de lo que les pasa por pudor o vergüenza.
  Ese miedo generará la búsqueda activa de información, se seguirán consolidando esas sensaciones que a poco a poco dejarán de sentirse como "incorrectas", pasando a ser propias, especiales y positivas en la medida que se vayan justificando. Sin embargo, sigue el conflicto directo con los aspectos sociales y el comportamiento políticamente correcto.
  Una mujer en la sociedad moderna ya no se ve como sumisa o débil, por el contrario el hombre pasó a ser más solidario con todo aquello que antiguamente era función única de las mujeres. Ante esa nueva postura se generan una gran diversidad de fantasías, pero esas mujeres y hombres que las desarrollan se convierten en un peligro para su género, hasta pueden ser marcados como monstruos o sádicos si las exponen abiertamente.

ETAPA 3 - La de la Búsqueda
  Las ganas y los deseos de concretar las fantasías ya son incontenibles, no se pueden guardar para sí mismo y se comienza la búsqueda de otros con quienes compartir lo que se siente. Se comienza a participar en alguno de los sitios de Internet, tratando de relacionarse y adentrarse más activamente en la comunidad, hasta encontrar personas como él o ella. Es cuestión de tiempo, pero se tiene la tranquilidad y la contención al saber que hay otras personas que piensan y sienten igual. Es así porque sobran libros, relatos personales, videos, cuadros, dibujos y hasta algunas esculturas.
  Esta etapa de la búsqueda, es también un momento de revelación para la mayoría de la gente, porque se pretende que otros nos entiendan, pero podemos llegar a vernos espantados al ver las prácticas o las búsquedas de los demás. Es un proceso de refinación, de tolerancia y apertura mental que difícilmente podría adquirirse en condiciones normales. 
  Estos prejuicios que se hacen sobre los demás, son una de las razones por las que a veces se demora el concretar algo con otros.

ETAPA 4 - La Materialización de la Fantasía
  También la podemos llamar "La Búsqueda Activa", los deseos por concretar algo, ya se convirtieron en una obsesión. Los miedos y los prejuicios ya no son freno ante los deseos.
  Si esta situación se diera en una relación ya existente, es muy frecuente que se ponga en juego toda la relación y en muchos casos el propio fin de la relación. Muchos sabiendo los altos riesgos que eso implica, van a intentar satisfacer esos deseos y fantasías en secreto.
  Otras personas más terminantes, llegan a la disyuntiva de darle la prioridad al BDSM como un estilo total de su vida entera, implica querer vivir a cualquier precio estas sensaciones, poniéndolas por delante de cualquier otro aspecto de su vida personal afectando directamente una relación.
  En la mayoría de los casos, a las personas le lleva un cierto tiempo equilibrar su vida diaria, intentando ser una persona diferente en diferentes momentos. Eso se da especialmente en los roles sumisos que deben intercalarlos con sus funciones profesionales, su rol de padres y actividades sociales. Tampoco es fácil darle una prioridad a los ideales y ajustarse a una nueva escala de valores. Todo eso se irá adecuando en la medida que se vaya fortaleciendo y adecuando a ese nuevo rol elegido.
  En el camino es muy probable que se produzcan grandes decepciones y desilusiones. Más posibilidades de que esto suceda se da de encontrarse un buen compañero de viaje. De no ser con la pareja estable. Tener en cuenta las referencias de los demás puede evitar experiencias desagradables y pasar por malos momentos.

ETAPA 5 - La Reconciliación
  Es la etapa donde uno acepta sus fantasías, comienza a entenderlas, las hace evolucionar y las ajusta a su medida, porque la información recopilada de las cosas que se han visto y de las propias experiencias van teniendo un significado claro de lo que sucede interiormente y sobre todo en la mente.
  En las cuatro primeras etapas, claramente podemos calificarlas como de aprendizaje, pero en esta, estamos hablando de aquella persona graduada. Si bien nunca se termina de aprender, lo que sucederá de aquí en adelante será un refinamiento. Hasta incluso puede darse, la inactivación o el retiro de las prácticas BDSM, pero de ser así, será siempre después de un largo proceso de maduración personal.
  Puede darse que hasta llegar a este punto, se haya pasado por más de una relación y diversos tipos de prácticas hasta encontrar la pareja ideal. será Utilizamos el plural aquí, porque la mayoría de gente de BDSM pasa por más de una relación (a veces muy cortas) y otras experiencias antes de encontrar la pareja adecuada.
  Se pueden producir algunos cambios más y estos serán más finos. El trabajo duro ya se hizo y simplemente queda por pulir algunas cosas, reafirmar más algunas ideas mientras, pero siempre en ascenso. Hay prosperidad, seguridad y aprendizaje en relaciones más equilibradas con un fuerte intercambio erótico cargado de una energía que difícilmente puedan sentirse en relaciones convencionales que en el ambiente BDSM se dicen que pertenecen al "Mundo Vainilla".  

A tener en cuenta:
  Hay que tener en cuenta que todo lo anteriormente descrito en este trabajo "no se ajusta a todos por igual". Hay quienes saltan etapas, las combinan o lo que fuera. Lo normal sería que una persona fluya suavemente de una etapa a otra. Las etapas como tales, no tienen principio ni un final marcado, como así tampoco un tiempo especifico para permanecer en cada una de ellas.  
  Todo el proceso puede llevar en algunos casos muchos años, porque debemos contemplar las circunstancias, las capacidades personales y el lugar donde la persona radique. El acceso a la información y la capacidad de cada uno para buscar, son vitales para marcar una velocidad de desarrollo entre una etapa y otra.
  Las desilusiones, la incertidumbre o peor aún, llegar a padecer un abuso que no estuviera consensuado puede ocasionar conflictos suplementarios que no solo alargan las etapas, sino que se corre el gran riesgo de retroceder. Muchas de estas víctimas son las principal causa (y con razón) de que quienes practican el BDSM no gocen de buena fama, haciendo que otros claudiquen o pierdan todo tipo de interés en continuar.
  Por más que se esté con la pareja adecuada, los comienzos son el periodo más delicado, debido a la necesidad acordar, resolver las contradicciones de aparentes entre el consenso y la entrega. No se logra de la noche a la mañana cambiar a una persona común, pacifica, de valores nobles a un "Dominante" que debe imponer castigos cuando sus antojos o placeres no son consentidos, como así tampoco un candidato dispuesto a ser sumiso logre ser el fiel sirviente de la parte dominante.
  Estas dificultades se deben a la normal y natural tensión que existe desde las libertades de la parte sumisa ante las necesidades y la autoridad creciente que va adquiriendo la parte dominante progresivamente. Sumiso y Dominante saben que uno existe gracias al otro y que sin el otro no son nada, por eso, para que haya un constante progreso, no se deben dar situaciones en las que la parte dominante vea socavada su autoridad.  
  Para evitar que eso suceda, se debe crear un modelo de transición por el cual la parte sumisa va transfiriendo de manera creciente sus conocimientos y evolución a la autoridad del dominante y ambos van consolidando así una confianza mutua. Poco a poco se va subiendo la vara y ambas partes se ven satisfechas por los resultados.
  La sumisión por etapas, puede acordarse verbalmente, o por acuerdos escritos (hay que tener presente que estos acuerdos no tienen ninguna validez legal). Más allá de que se acuerde algo o no el proceso interno habrá comenzado desde que se acepta la idea, le sigue la búsqueda de material e información, llegará la entrevista y luego la propia experiencia. Todo esto ira generando confianza en la persona que quiera entrar en el BDSM.
  Se sostiene por muchos practicantes del BDSM que hacer las cosas por etapas da resultados más seguros y más rápidos que un proceso de ensayo y error. Sin olvidar que los errores van socavando la confianza (en la parte sumisa) o la autoridad (si fuera la parte dominante). 


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