sábado, 30 de noviembre de 2013

Mesalina - Su Biografía



    

  Debo reconocer a Mistress Roxy el haberme metido la pulga en la camisa para conocer más sobre la vida de esta mujer tan particular. Imposible saber o tan solo adivinar que quedará en la cabeza de cada uno luego de leer la vida de esta joven romana.
  En el Museo de Louvre se conserva una estatua que la representa como una adolescente de rasgos finos y delicados, con un perfil bien dibujado, rizos abundantes alrededor de la frente y labios infantiles ligeramente entreabiertos en un esbozo de sonrisa.
  Es la Augusta Meretriz (la sublime ramera) fue una muchacha romana de muy buena familia, solamente vivió 23 años y por dos milenios se vienen contando sus vicios, obscenidades y caprichos, señalándola como la más escandalosa de todas las mujeres de la antigua Roma y hasta quizás de la Historia.
  Muchos escritos describen a Mesalina como una mujer experimentada e insaciable, corrupta y cruel y esto lo sabemos gracias a los Anales de Tácito, quien nos describe sus correrías nocturnas y su insaciable búsqueda de amantes ocasionales, también resulta imposible ignorar lo que escribieron de ella Suetonio y Plinio el Viejo. Para cualquiera que esté interesado en el FemDom, estos serían valiosos documentos a sumar a una exclusiva colección privada.
  Pero para conocerla y comprenderla de verdad hay que saber leer entre las líneas de sus vicisitudes personales e históricas, y sobre todo es necesario tener en mente cuán corrupta y sanguinaria era la Roma de entonces. Una época de moral contradictoria donde las conspiraciones, las delaciones y los asesinatos no daban tregua; el propio palacio del emperador era escenario de muerte y de vicio. Por ende Mesalina es el fruto de aquella época turbia y difícil.
  Hija de Valerio Mesala Barbato y de Domicia (sobrina de la hermana de Augusto), crece dentro de la aristocracia romana y con solo quince años era una de las mujeres más deseadas de Roma, lo era por su belleza, su doble ascendencia Julia e incluso por su patrimonio. En el 41 d.C. Calígula la entregó en matrimonio a su tío Claudio, quizá por temor a que los Julios se mezclasen con otras influyentes familias aristocráticas, que podrían hacer peligrar la continuidad monárquica de los descendientes del divinizado Augusto, o, simplemente, como producto de su refinada crueldad. Es así que se convierte en la tercera esposa de Claudio.
  Al año siguiente Claudio fue aclamado luego de la conjura que había llevado al asesinato de Calígula. Para los defensores del imperio, Claudio representaba un elemento de continuidad y una garantía contra cambios más profundos que se proponían. De este modo Mesalina se convierte en la consorte nada menos que del “Amo del Mundo”.
  En Roma sobreviven todavía las leyes republicanas, según las cuales las mujeres no tienen ningún derecho, ni siquiera a tener un nombre propio, sólo pueden aspirar al nombre de la gens a la que pertenecen. De hecho, Mesalina es el diminutivo de Mesala. Aunque estén sometidas a una condición de tutela perpetua, tanto del marido como del padre, con una existencia marcada por continuas prohibiciones y amenazada por penas muy severas en caso de desobediencia, en realidad a las mujeres romanas del siglo primero después de Cristo se les conceden muchas libertades, como por ejemplo divorciarse, interrumpir sus embarazos y frecuentar a quienes deseen. Es un hecho que las antiguas normas de la ley no se respetan en absoluto. Según la lex, el incesto debería castigarse con la muerte. Sin embargo, en esos años, en Roma, el incesto es una práctica muy extendida. El propio emperador Calígula acostumbra a dormir con sus dos hermanas, demostrando una indiferencia absoluta por las leyes y la moral, para devolver el brío a sus finanzas mermadas, no duda en hacer que se prostituyan, junto con otras nobles parientes, en un ala de su residencia habilitada para ello. Éste es el clima moral en el que se mueve Mesalina; éste es el clima del palacio en el que hace su entrada como joven esposa de Claudio.
  Era una muchacha hermosísima y de carácter brillante, consciente de su origen y de los privilegios de su nacimiento, tuvo que aceptar ser entregada como esposa de un hombre quincuagenario, cojo, tartamudo, muy poco atractivo, a tal punto que era considerado por su propia madre como “un aborto que la naturaleza había creado sin concluir" y cuando fue coronado Emperador ya estaba entrando casi en la ancianidad .
  Muchos describen a Claudio en tonos grotescos, pero la realidad dice que en sus primeros años de su gobierno, fue un emperador activo y muy atento a la cosa pública, además de un buen general, a quien le bastó una campaña de dieciséis días para culminar la conquista de Bretaña.
  Mesalina le da dos hijos, Octavia y Británico. Ella le exhibe su gracia luminosa en los banquetes. Pero Claudio la descuida, absorto en su tarea de sanear las finanzas de Roma y en reorganizar las cuatro oficinas centrales de la casa imperial, que encomienda a cuatro libertos, Narciso, Palante, Polibio y Calixto. La otra falta que comete el emperador es despreciar los encantos de su esposa, prefiriendo las prestaciones más expeditivas de dos profesionales del sexo. Entonces, sintiéndose sola, con apenas dieciocho años de edad, atormentada por los celos, Mesalina trata de conseguir alguna influencia en el ambiente de la corte.
  Se cree que es así como comienza la carrera de la emperatriz donde terminará siendo calificada por el mundo clásico como uno de los ejemplos de perversión y ninfomanía más destacados de la historia. Insatisfecha con sus amoríos constantes con los más jóvenes cortesanos, muchos de los cuales murieron por haber accedido a sus deseos, mientras que otros lo hicieron por haberse negado. También se propone como objetivo lograr la condena a muerte del marido de su madre. Para ello se alía con el liberto Narciso, que de hecho la libera del padrastro, pero a la vez suscita contra ella una pérfida espiral de chantajes de la que la joven emperatriz se defiende con excesiva ingenuidad, sin astucia ninguna, limitándose a exhibir su soberbia conciencia de impunidad.
  Es probable que la joven esposa de Claudio lograse eliminar a algunos de sus adversarios, entre ellos al poderoso liberto Polibio, pero nunca llegó a ejercer una influencia política real sobre su marido, tampoco tenía capacidad para hacerlo.
  Narra Seutonio, que aburrida Mesalina organiza en sus estancias una vida más brillante que la que puede ofrecerle Claudio. Para amenizar las fiestas y las reuniones requiere la presencia asidua de Mnéster, un actor célebre, no sólo por sus espectáculos, sino también por sus prestaciones sexuales. Mnester es un bisexual que unos años antes había sido el favorito de Calígula, y que cautiva sin dificultad a la joven Mesalina, de dieciocho años, logrando que se enamore de él. Más que amor se trata de encandilamiento, de curiosidad, sobre todo sexual. Lo cierto es que Mesalina lo desea.
  En un primer momento, Mnester se sustrae tenazmente a sus invitaciones. Quizá no cree prudente tener una relación con la esposa del emperador. Quizá Mesalina, si bien muy hermosa, no le gusta lo suficiente. Hasta que comprende que negarse puede ser más peligroso que entregarse: entonces pasa a convertirse en su amante.
  En las estancias de Mesalina las fiestas son cada vez más desenfrenadas. Para animar sus propios impulsos, bastante tibios en realidad, Mnester la inicia en extravagancias sexuales y en una promiscuidad sin prejuicios, con caballeros, aristócratas y prostitutas de excepcional belleza y fantasía. Se cuenta que obligaba a mujeres de familias prestigiosas a prostituirse, incluso en presencia de sus maridos, a cambio de honores y cargos en la ciudad. En una de esas ocasiónes, tras cruzar una apuesta con otra famosa cortesana de la época llamada Escila, donde Mesalina tuvo relaciones sexuales en público con 25 hombres consecutivamente. Cuando Escila se rindió y Mesalina salió victoriosa, pues superó la cifra al llegar al amanecer y seguir compitiendo. Según se dice, aun después de haber atendido a 70 hombres no se sentía satisfecha, llegando hasta la cifra increíble de 200 hombres (pero sin maneras de que esto pueda ser corroborado). Cuando Mesalina pidió a Escila que regresara, ésta se retiró diciendo: "Esta infeliz tiene las entrañas de acero". En las palabras del historiador Suetonio, esta actividad incesante dejaba a la emperatriz “lassata, sed non satiata” (cansada, pero no saciada). Todo ese frenesí erótico le hizo tomar conciencia a Mesalina de la pobreza de su vínculo con Mnester, del que se cansa rápidamente.
  Claudio ha inaugurado una época de represión despiadada, y Mesalina tiene miedo por ella y por el futuro de su hijo. Ella es emperatriz, pero ve cómo su trono se tambalea. Es consciente de que no goza del favor de la corte ni del grueso de la burocracia del palacio ¿Qué sería de ella si muriera el Emperador? ¿Qué sería de su hijo, el pequeño Británico, blanco ya de las insidias de Nerón, hijo de su eterna rival Agripina. Sin lugar a dudas un “animal político” mucho más hábil y consumado que ella. Por eso, para poder disfrutar de un poco de tranquilidad y de seguridad, Mesalina piensa que debería tener un círculo de amigos en quien confiar. Pero ¿cómo conquistarlos? ¿Cómo mantener su lealtad?
  Una vez más, aparece el liberto Narciso con una propuesta interesante: para obtener los fondos necesarios para tejer una red de personas de confianza ¿Por qué no vender a alto precio el título de “civis romanus”? Algo tan codiciado en las provincias del imperio. Claudio ha creado seis nuevas provincias: las dos Mauritanias, Bretaña, Judea, Tracia y Licia. Y tiene la intención de ampliar la orden de los senadores y los caballeros. Por lo tanto, la ocasión no puede ser mejor. Mesalina, que se siente sola y acosada por el peligro, desearía fiarse de Narciso, pero al mismo tiempo lo teme.
  Presa de la inquietud, de las intrigas y del temor. Sexualmente ya está alejada de Mnester, pero no puede contener más sus necesidades sexuales y es así que inicia sus aventuras nocturnas en el barrio popular de la Suburra. Esas mismas de las que nos habla Tácito, con tanto lujo de detalles. Vestida a la moda de las prostitutas de la época, con el pecho reluciente de polvos dorados, los ojos más oscuros y voluptuosos gracias al antimonio, y la boca pintada de carmín, la emperatriz se ofrece en los burdeles de la capital. Con el trasfondo de la Roma imperial y sus caóticas calles, atestadas de artesanos, libertos, mimos, prostitutas y pretorianos, prospera y se comienza a extender “La Leyenda de la Augusta Meretrix".
  Desde el momento en que Claudio fue proclamado emperador, Mesalina supo que tenía la posibilidad de convertir a su hijo en heredero del trono si conseguía que su marido sobreviviera hasta la mayoría de edad de Británico y eliminaba a todos sus oponentes, reales o potenciales. Para ello urdió cuantas intrigas fueron necesarias, apoyándose en los libertos de Claudio. Con la complicidad de éstos, Mesalina trató de mantener a Claudio ignorante por años de cuanto sucedía en palacio, al tiempo que se ocupaba de asuntos de Estado de máxima importancia y, sobre todo, se dedicaba a quitar de en medio a todos los potenciales rivales para el ascenso de su hijo al trono imperial.
  Las nietas de Augusto, Agripina y Livila, habían sido condenadas al destierro por su propio hermano, Calígula. Claudio, que pretendía fortalecer los lazos de consanguinidad con la familia Julia, las hizo regresar a Roma, donde fueron acogidas por el pueblo con gran entusiasmo, convertidas en mártires de la tiranía de Calígula. Agripina, antes de marchar al destierro, había dejado a su hijo Lucio Domicio Nerón (el futuro emperador) al cuidado de Domicia Lépida, madre de Mesalina. Tan pronto como Agripina regresó a Roma, Nerón se convirtió en el verdadero contrincante de Británico, pero también en el único que escaparía a las maquinaciones de la emperatriz. Livila, por su parte, no tenía hijos, pero estaba casada con Marco Vinicio, a quien el Senado había presentado como candidato al trono el mismo día del asesinato de Calígula.
  Es probable que el emperador Claudio si estuviera plenamente consciente de toda la situación, o quizá no sabía lo suficiente. Sea como fuere, él sigue teniendo por su joven consorte un sentimiento de protección afectuosa, aunque sin lugar a dudas distraída. Quien, por el contrario, espera el momento propicio para asestar a Mesalina un golpe mortal es la ambiciosa y enérgica Agripina. Ésta tiene como aliado a Séneca y ambiciona el trono. No tanto para sí, sino para su hijo Nerón.
  El primero en encontrar la muerte por medio de un ardid de Mesalina fue precisamente el comandante de las tres legiones asentadas en la Hispania Tarraconense, Apio Silano, nombrado gobernador por Calígula. Según Dión Casio, Mesalina convenció a Claudio para hacer de Apio Silano uno de sus más cercanos colaboradores, al tiempo que le concedía la mano de Domicia Lépida, la madre viuda de Mesalina. Tras incluirlo en su círculo, Mesalina comenzó a requerir sus favores sexuales y ante su negativa, decidió eliminarlo.
  Por medio de las intrigas palaciegas y sexuales, Mesalina continuó deshaciéndose de los rivales de Claudio y de Británico. Con total caradurez acusó a Livila (hermana de Calígula), de adulterio con el senador y filósofo cordobés Lucio Anneo Séneca. Mesalina temía la influencia que Livila podía ejercer sobre su tío Claudio, con el que mantenía una estrecha relación, y quería romper los lazos que unían a su esposo Marco Vinicio, favorito del Senado, con la familia Julia. Entonces, Livila fue desterrada nuevamente al sur de Italia, donde murió asesinada poco después. Séneca, por su parte, marchó a Córcega, donde escribió su “Consolación a Polibio”, una larga carta dirigida al secretario de Claudio, para conquistar su perdón. No lo logró hasta el 49 d.C., cuando Agripina la Menor lo hizo regresar como instructor del futuro emperador Nerón.
  Los siguientes en ser eliminados por Mesalina fueron Marco Vinicio y Valerio Asiático, colegas en el consulado del año 46 d.C., partícipes ambos en el asesinato de Calígula y propuestos por el Senado como candidatos al trono en el 41 d.C. Mesalina temía que Vinicio tramara su destrucción como venganza por el asesinato de su mujer, Livila, por lo que decidió envenenarlo ella misma. En cuanto a Valerio Asiático, la emperatriz ansiaba no sólo su destrucción, sino los maravillosos jardines de Lúculo, que había remodelado.
 Asiático era uno de los hombres más ricos e influyentes de Roma en aquel momento y controlaba las tropas de Germania y una numerosa clientela en la Galia Narbonense, a la que estaba ligado por nacimiento. Pero todo su poder quedó anulado por la astucia de Mesalina. Sosibio, preceptor de Británico, acusó a Valerio Asiático de adulterio con Popea, esposa de Escipión y madre de la futura amante de Nerón. Asiático fue arrestado en Bayas e interrogado en privado por Claudio y Mesalina. Se le condenó a muerte sin juicio previo en el Senado. Tras una cena y un baño tranquilos, Asiático se cortó las venas, comentando con ironía que había escapado a los perversos Tiberio y Calígula, pero había caído presa de las insidias de una mujer y de la credulidad de Claudio. Cuenta Tácito que “Mesalina se apresuró después a urdir la ruina de Popea, instigando a algunas personas a que la impulsaran al suicido por temor a la cárcel”.
  En este clima de temor y de incertidumbre busca Mesalina distracciones que la aturdan. No le importa el escándalo: no hace nada, o casi nada, por ocultarse. Quizá añora la ilusión amorosa que sintiera alguna vez por Mnester, o quizá ya no piensa en el amor.
  Sin embargo, de repente Mesalina se enamora, con violencia ciega y dedicación absoluta, pero no estamos hablando de uno de los pretorianos con los que suele acostarse, sino de un joven patricio. Tácito lo describe como “el más hermoso de toda la juventud romana”. Este patricio de treinta y cinco años se llama Gayo Silio.
  Así pues, Mesalina está enamorada. Con su joven corazón de veintidós años y quiere a toda costa atraer hacia sí el objeto de su amor. Cualquier medio es bueno: ora su generosidad, ora su autoridad. Todo por que Gayo Silio tenga siempre lo que desea, y su vínculo con ella sea cada vez más estrecho. La pasión, violenta y absoluta, termina conduciéndola a la imprudencia. Ambos, con el inconsciente exhibicionismo de los enamorados, no son nada discretos. Ahora su relación está en boca de todos y suscita escándalo.
  Para poder regalarle una espléndida mansión en el Pincio, Mesalina manda condenar a muerte a su propietario legítimo, Valerio Asiático, considerado por todos como un hombre amable e influyente. A todo esto Agripina y sus amigos esperan el momento oportuno para asestar contra la incauta emperatriz el golpe decisivo y Mesalina para nada prevenida de todo esto, desarrolla un proyecto delirante: “casarse con su amante”. Decidida a hacer realidad su sueño, organiza un plan del todo descabellado para poder ser libre de nuevo y no incurrir en la ira del emperador, es necesario que Claudio muera asesinado.
  Estamos en el año 48 después de Cristo y Mesalina urde, pues, una conjura, para la que encuentra cómplices desprovistos de toda credibilidad y consistencia. El jefe de bomberos, algún jovenzuelo desenfrenado, algún antiguo amante, no faltan los candidatos. Pero los notables del palacio, informados sin tardanza de ese complot de poca monta, están alertas, preparados para intervenir en el momento oportuno.
  Cuando las pruebas de lo que Mesalina está tramando son ya inocultables le advierten a Claudio de la situación. Con solo eso, el emperador ya debería castigarla con la muerte. Pero, una vez más, lo retiene el antiguo sentimiento de protección que siente por esa mujer mucho más joven que él.
  ¿Quién toma las riendas de la situación y convence al emperador de la necesidad de matar a los dos amantes, los dos conspiradores? El liberto Narciso, el antiguo y falso aliado de Mesalina.
  Él mismo en persona ordena que se dé muerte a Gayo Silio y después de él, a la emperatriz. Desesperada por la muerte de su amante y movida por un último impulso de dignidad, Mesalina trata de quitarse la vida, dirigiendo un puñal contra su hermoso seno. Pero cuando llega el instante decisivo, le falta valor, le tiembla la mano y la punta del puñal ni siquiera acierta a provocarle un rasguño. Perdiendo la paciencia, el oficial encargado de eliminarla le clava una daga en el corazón, y Mesalina expira.
  Al cabo de poco tiempo, Claudio se casa con Agripina y adopta a Nerón. En el año 54 Claudio muere, y son muchos los historiadores convencidos de que no fue de muerte natural, sino inducida por Agripina, que lo envenena para allanarle el camino a su hijo.
  Como temía Mesalina, el hijo que tuvo con Claudio, Británico, no llega a ser emperador; no inscribe su nombre en el cuadro de honor del imperio romano. A quien, por el contrario, nadie olvida es justamente a ella, a la escandalosa Mesalina: todos recuerdan sus desenfrenos y sus extravagancias sexuales, sus caprichos y sus locuras; que desde luego realizó, pero que no fueron el único emblema, el único sello distintivo de su vida: si se lee entre líneas, la historia de Mesalina nos narra una Roma violenta y misógina, corrupta y hábil, feroz y disoluta.
  Una realidad que una jovencita de quince años afrontó con ingenuidad e inexperiencia y en el momento decisivo, todos fueron más crueles, más hábiles y más astutos que la bella Mesalina, desde los pretorianos que la poseyeron cuando se fingía prostituta, hasta Agripina que logró eliminar a Claudio tras convertirse en su esposa, pasando por el liberto Narciso que fue su cómplice y que después ordenó su muerte. El escándalo que caracteriza a Mesalina es sobre todo el de la inexperiencia: el peor de los pecados para alguien que quiera vivir en el palacio imperial, en el corazón de la Roma imperial.-

Fuentes:
Cayo Cornelio Tácito - Anales Traducido por D. Carlos Coloma
Manuel - El Saber ocupa lugar
Wikipedia 

viernes, 29 de noviembre de 2013

La palabra puta es como una caja de Pandora

  Mistress Roxy escribió el 14 de noviembre de 2013 un editorial titulado "Las Señoras y la Caja de Pandora".  De este maravilloso artículo extraeré y analizaré las parte que como verde sumiso empezando en el FemDom me sacudieron .
  Como Mistress Roxy y su guardián Dog Willy no son personas comunes, muy por el contrario son personas culturalmente muy preparadas y al solo leer los títulos de sus artículos uno se da cuenta que no son para cualquiera y a la larga todos presentan un desafío intelectual. A veces al leerlos, me siento dentro de la película "El Código Da Vinci" dirigida por Ron Howard, protagonizada por Tom Hanks y Audrey Tautou, donde hay que descubrir una serie de asombrosos secretos ocultos en las obras de Leonardo Da Vinci, descubrirlos los llevará a una sociedad secreta encargada de custodiar un antiguo secreto que ha permanecido oculto durante dos mil años.
  Siguiendo esa metodología y como gran admirador de Mistress Roxy y Dog Willy, trataré de poner blanco sobre negro sobre algunas puntos con la intensión de siempre: el deseo de que estas palabras sirvan a los demás de igual manera en que me sirven a mí para tener un poco más de cultura y conocimientos sobre sexualidad.
  Como siempre al final publicaré el acceso a la fuente de este artículo.
  La palabra puta es como una caja de Pandora
  Cuando volvamos a decir puta, deberíamos saber primero de que estamos hablando, Mistress Roxy hace una aproximación, pero se guarda algo para ella, por eso analicemos más su etimología proveniente del latín que según Corominas deriva de la palabra "putta" (muchacha) y su masculino "puttus" (chiquillo), hay una segunda posibilidad según Puvarrubias quien sostiene que deriva de la palabra "putida" (podrida) y hace esta afirmación en base a esta cita "moecha putida, redde codicillos" (puta hedionda, devuelvenos los libros) tengamos presente que en aquellos tiempos las rameras, eran ruines, escalentadas y de mal olor.
  Ahora veamos que nos dice la historia al respecto, resultó que cuando los romanos vencieron a los griegos, los tomaron como esclavos. Aunque los romanos eran militarmente superiores, no eran tan civilizados como los griegos. Fue por eso que algunos esclavos cultos fueron usados como pedagogos domésticos para sus hijos. Obviamente a las esclavas las usaban para otras cosas, pero al pasar tiempo con ellas, los amos se dieron cuenta que además de conocer el arte del amor, estaban versadas en las ciencias del día es decir la filosofía, la astronomía, la política, etc. Por estos dones fueron clasificadas como pensadoras, o sea "putas" y de esta manera logramos afirmar el estatus elevado que Mistress Roxy nos quiere hacer ver.
  Por ahí no es mucho lo que sabemos de "La Caja de Pandora", lo asociamos a una acción en apariencia pequeña o inofensiva pero que puede acarrear consecuencias importantes o de largo alcance. En la mitología griega, Pandora fue la primera mujer humana concebida por los dioses. Su creación estuvo a cargo de Hefesto y Atenea, bajo las órdenes de Zeus. Por su intermedio, el padre de los dioses pretendía introducir males en la vida de los hombres, después de que Prometeo, yendo en contra de su voluntad, les otorgara el don del fuego. La caja era en realidad un pithos (tinaja ovalada) que le fue dado a Pandora y contenía todos los males del mundo. La historia cuenta que después de que Pandora recibiera la caja, recibió también una orden de Zeus diciendo que jamás debería abrirla. Pero ella día tras día, estaba cada vez más curiosa por saber su contenido. Un cierto día, decidió abrirla para ver qué había dentro. Cuando lo hizo, comprendió el grave error cometido y rápidamente cerró el recipiente. Sin embargo era demasiado tarde, pues todos los males ya habían sido liberados. Solo permaneció uno: Elpis, el espíritu de la esperanza.

OTRAS PERLAS DEL ARTICULO DE MISTRESS ROXY

En lo que hace a su fonética (hablando de la palabra puta), me encanta escucharla de parte de mis enemigos porque sé que me lo he ganado en buena ley: Una manera sumamente elegante de decir que la envidia, la impotencia o el enojo de los otros la fortalece.  

Pretendo, casi con un ciento por ciento de éxito, que muchos me identifiquen con esa puta que les quedó pendiente en su vida, esa perra inalcanzable, inaccesible: Puede sonar a pedantería y egocentrismo, pero no abundan personas con esa autoestima u orgullo tan elevado. Más difícil que escribirlo, sin duda es sostenerlo con los hechos y a lo largo del tiempo, pero lejos estoy de poder afirmarlo o negarlo.

Lo divertido del caso es que en mis encuentros con partenaires sexuales en los que realmente soy puta (o por lo menos, me muestro como tal), me gusta que se refieran a mí como dama o señora: El solo imaginar la escena, puede volarle la cabeza a cualquier mortal que provenga del mundo vainilla y caiga por accidente en esta situación.-

Para mi cornudo esclavo marido, soy la más puta de las señoras en la sociedad y la más señora de las putas en nuestro dormitorio: Aplaudo de pie al marido que estoico resiste el rigor de tener que vivir en ambos mundos y día a día supera la exigencia.

A algunas mujeres, suelo encenderlas cuando las trato de putas, las libero de tabúes y les despierto sus reprimidas feromonas. Pero en todos los casos, la palabra puta es un premio, hay que ganárselo, no se lo merece fácilmente: Una cita que muestra solidaridad y caridad, un llamado para que otras mujeres despierten al sentir la dulce melodía del FemDom y disfruten a pleno de su sexualidad.

El deseo sexual femenino tiene entonces la capacidad de desatar una verdadera catástrofe social, porque pude llegar a poner en duda la capacidad del hombre para satisfacer sexualmente a una mujer: Probado en los hechos de nuestra limitación de poder satisfacer plenamente a una mujer sexualmente, aquí un llamado a la Revolución por el FemDom.

La conducta libertina es promovida y aplaudida pero sólo en sumisas, porque el libertinaje femenino debe depender en última instancia de la voluntad de un hombre: Lo entiendo, pero no me es fácil explicarlo en palabras, pero me suena a "basta". Queremos poder construir espacios propios, gobernados a gusto de nuestra voluntad y las nuevas reglas del FemDom que cada una establezca en su calabozo.

Se supone que una dómina no debe ser sinónimo de sexo, que una dómina se debe hacer valer, que debe poner cierta distancia entre ella y la carne sexual, pero resulta que Yo me defino como Dómina no debido a la gracia y entrega de un sumiso sino por mi absoluta libertad para cumplir con mis deseos y ejecutarlos sin rastros de pudores ni éticas ajenas. Por lo tanto, no me siento alcanzada por aquellas sentencias y por supuesto, disfruto violándolas: Una opinión completamente  personal que no necesita ningún comentario y aclaración, ya que es por demás contundente.

Mi poder no es fruto de una cesión consensuada; es el poder de la Pompadour y de Wanda, de Marlene y de Mesalina. El temible y omnipotente poder de Isis y Afrodita. El poder que disfrutamos las señoras que elegimos divertirnos con el sexo, las que abrimos la caja de Pandora somos señoras sensuales, femeninas y muy putas: Trataré de describir a cada uno de los íconos elegidos por Mistress Roxy, quedando en deuda con Marlene, que no sé exactamente a quien se refiere.

 Jeanne-Antoinette Poisson: Duquesa-marquesa de Pompadour y marquesa de Menars, con paridad francesa, conocida como Madame de Pompadour, fue una muy famosa cortesana francesa, la amante más célebre del rey Luis XV, además de una de las principales promotoras de la cultura durante el reinado de dicho rey. Fue presentada oficialmente en la corte cuando tenía 23 años, posteriormente el título de duquesa, con derecho al escabel (sentarse frente a la reina) pero nunca hizo uso de él y continuó utilizando el rango de marquesa. Pese a que compartió la cama del rey sólo durante algunos años, nunca perdió su condición de favorita, de "amiga necesaria", de confidente hasta el final de su vida.
  Para conservar su posición de favorita oficial, alentó la inclinación del rey por las damitas ligeras, muy jóvenes y hermosas. Durante su reinado de veinte años, mantuvo unas relaciones muy cordiales con la reina. Madame de Pompadour preparaba, asimismo, todos los informes entre el rey y sus ministros, también favoreció el proyecto de la Enciclopedia de Diderot y protegió a los enciclopedistas. Dio trabajo al pintor Boucher y a numerosos artesanos en la manufactura de porcelana de Sèvres. Organizó, en la corte, toda clase de espectáculos, protegió a los escritores, aprendió a bailar, grabar y a tocar la guitarra. Supervisó la construcción de monumentos tales como la Plaza de la Concordia y el Pequeño Trianón. Poseía varios palacios y castillos, entre los cuales, como residencia parisina usaba el Palacio del Elíseo.-

 Cuando Mistres Roxy menciona a Wanda, supongo se refiere a Wanda Jean Jackson, "La Reina del Rockabilly" quien es considerada la primera cantante femenina de rock and roll.-

  Valeria Mesalina (25 d. C. – 48 d. C.) Fue la tercera esposa del emperador Claudio, célebre por su belleza y las constantes infidelidades a su esposo, con miembros de la nobleza romana, así como con soldados, actores, gladiadores y otros, como el orador Marco Vinicio, cónyuge de Julia Livia. Tuvo gran influencia política en las decisiones que tomó su marido durante gran parte de su periodo como emperador romano; en este sentido, podemos compararla con otro personaje de la historia romana, Livia.
  Mesalina dio rienda suelta a su ninfomanía. Según narra el poeta Juvenal, llegó a prostituirse en el barrio de Subura bajo el apodo de Licisca (Mujer-loba). Orgullosa de su legendaria lascivia, lanzó un reto al gremio de las prostitutas de Roma: las instaba a participar en una competición, que ella organizaría en palacio, aprovechando la ausencia de Claudio, quien estaba en Britania. Dicho desafío consistía en saber quién podía atender a más hombres en un día. El certamen daría inicio por la noche, y a él asistirían muchos hombres importantes de la corte, además de otras damas a las cuales Mesalina había convencido de participar. Las prostitutas aceptaron el reto y enviaron a una representante, la prostituta más famosa de Roma, una siciliana llamada Escila.
  Aquella noche, después de haber sido poseída por 25 hombres, Escila se rindió y Mesalina salió victoriosa, pues superó la cifra al llegar al amanecer y seguir compitiendo. Según se dice, aun después de haber atendido a 70 hombres no se sentía satisfecha, llegando hasta la cifra increíble de 200 hombres. Cuando Mesalina pidió a Escila que regresara, ésta se retiró diciendo: "Esta infeliz tiene las entrañas de acero".

  Isis es la Diosa de la mitología egipcia considerada por algunos como el prototipo de la Virgen María. Su nombre egipcio era Ast, que significa trono, representado por el jeroglífico que portaba sobre su cabeza, fue denominada: "Gran Maga, Gran Diosa Madre, Reina de los Dioses, Fuerza Fecundadora de la Naturaleza, Diosa de la Maternidad y del Nacimiento.
  Plutarco, un erudito griego que vivió entre 46 CE y 120 CE, escribió sobre Isis y la consideraba como una Diosa excepcionalmente sabia y amante de la sabiduría, poseedora del conocimiento y la comprensión en el más alto nivel. Plutarco le adjudica la siguiente inscripción "Soy todo lo que ha sido, es y será, y no ha descubierto todavía mi túnica ningún mortal".-



lunes, 25 de noviembre de 2013

Ser FemDom - Un triskel sádico, sensual y femenino

Por Mistress Roxy
Publicado el 5 de Marzo de 2013

 En la semana en donde se celebra el Día Internacional de la Mujer, dedico esta columna a Alinari, Lady Sonne y Mia Hudson, fundadoras de Solo Amas, mujeres audaces, pregoneras del FemDom y hadas madrinas de las Bellas No Durmientes.
 
  Nota: Los contenidos vertidos en esta columna están enfocados desde el placer que me genera mi propio comportamiento sexual - erótico (y tantas veces espiritual y social) Si usted la lee y la analiza a partir de una posición ética personal diferente a la mía, absténgase de juzgarla.

  La mujer FemDom hace lo que quiere - La mujer FemDom no hace lo que no quiere
  Su poder es genuino, nace de Ella y no es una graciosa concesión otorgada por otro (mucho menos un hombre, mucho menos de un hombre que dice ser sumiso). En el proceder de su vida radica el secreto de su poder: Ella domina, no doma; ella sugiere, no ordena. Ante Ella, todo es docilidad y adoración. Podrás ser el centro de su mundo si logras su amor pero Ella será siempre tu universo completo. Ella no teme ni se inclina ante ningún poder que no sea propio.
  La única Ley que vale es la de su deseo. Ese deseo puede mutar inesperadamente en capricho y en arbitrariedad, si así lo decide Ella. En muchas oportunidades, el varón es su objeto o herramienta de deseo, pero nunca de desprecio. Ella no necesita elevarse sobre la base de disminuir a otro porque Ella está elevada por sí misma, por su propia majestuosidad.
  La Noche, por su natural contexto seductor, morboso, estelar, es la gran aliada de la FemDom. La general ausencia de amigas mujeres, celosas de su poder es su maldición y a la vez, el módico precio a pagar por tan fortuito destino, por tanta felina libertad. Ella sabe lo que vale, sabe lo que busca, sabe lo que el mundo está ávido de otorgarle y está dispuesta a tomarlo, sin dar explicaciones ni rendir cuentas.
  La mujer FemDom es la mujer más deseada sexualmente, cualesquiera sea la elección sexual que hayas hecho. Esta gema del universo sexual humano brilla y resplandece con luz propia. Hace brillar a los que la rodean. Su luz tiene tres tonos básicos que se entremezclan, potenciándose y fusionándose entre sí.
   
  La Luz del Sado: La FemDom, desea, busca, y al encontrar, lo toma por asalto. No repara en deserotizantes moralinas ineficaces ni en legislaciones promulgadas por supuestos dominantes varones con grandilocuentes nicks. Ella no busca hacer daño, sino todo lo contrario, porque alrededor de Ella sólo hay goce y placer. Ella no espera, a Ella la esperan. Es augusta en su apetito de poder erótico. Tiene el sabor a femenina feromona, camuflando su dulce veneno letal. La conquista y la seducción la erotizan. Es una mujer de armas  tomar. Así que es mejor que nunca intentes desafiarla. Ella te exigirá dedicación completa a su servicio y no tu vida a su antojo. Cuando la sirvas, dale todo, ni más, ni menos. Ella no se conforma con dádivas y los gladiadores que la idolatren rogarán por que ella abuse de su poder ante ellos. Ella es la causa y consecuencia del festín, se sirve golosamente del banquete y te hace lavar los platos muy gustoso. Desparrama lujuria sin consenso y te envicia con su altanería pedante, siempre de sonrisa firme, siempre feliz. Es absolutamente excluyente en rechazar a masocas inseguros y a víctimas de la vida con dudosas historias.
  Quien pretenda acceder al servicio de la dama, deberá ser eficiente en atenderla y despojarse de sus inseguridades masculinas. El motivo del sadismo de la FemDom no es el dolor carnal causado al otro, sino el placer carnal obtenido del otro. Por eso es sádica.
  
   La Luz Sensual: La FemDom es pasión por las sensaciones a flor de piel. Como mujer, goza de los perfumes, de las caricias, de la estética, de la música y del arte culinario. Es obstinada en la belleza propia y en la de su entorno. Su delicadeza entremezclada con su firme personalidad es sabiamente femenina. No matiza, exagera las cualidades. Ama la naturaleza y la cuida, la preserva, la nutre. La FemDom colorea el ambiente y aterciopela el aire que la acompaña. Ella no anula al hombre, lo estimula en sus sentidos y potencia su virilidad a partir de su omnipotente sensualidad. Si te la imaginas, no te equivocas pues Ella ya estaba en tu mente antes que la conozcas personalmente. Ella valora su propio cuerpo y lo mantiene saludable y estético y establece una directa relación con tus sensaciones positivas, no traumáticas ni tampoco tóxicas ni autodestructivas. 
  
  La Luz Femenina: La FemDom jamás reniega ni sufre de su condición femenina, sino todo lo contrario, la goza. Bendice haber nacido mujer, pero no para odiar al macho, ni para vengar viejas afrentas de género, sino para ser complacida por aquellos a quienes Ella considera como grandes caballeros. Sabe coser, sabe bordar y siempre te abre la puerta con picardía para ir a jugar. Con Ella siempre te querrás casar. No se excita promoviendo reglas de conducta, como lo hacen esas amas que parecen ser madres sustitutas, sino que te aceptará a su lado si sabes formar parte de su guardia pretoriana. No decidió vivir como la amarga directora de escuela en una sociedad incorregible, sino ser Cleopatra en la alcoba perfecta. Es vaginal y luce sus tetas en coquetos soutiens. Tiene sedosa la cabellera aunque sea calva y siempre pone su culo en el asiento que más le place, cruzando las piernas con gatuna estirpe (nunca la encontrarás de brazos cruzados). Sabe hacer las cosas prácticas de la vida. Usa su femenina (y por lo tanto bífida) lengua cual látigo, tanto para humillar como para besar. Seductora y carismática, va siempre adelante con un segundo pensamiento por encima de lo coyuntural. Su fusta no necesariamente pega pero es seguro que Ella te pegará a su fusta de por vida.

  Para liberar al mundo, propongo llenarlo de "Calabozos FemDom". Y como varios saben mi único triskel en el cabezal de mi cetro FemDom es Sado, Sensual y Femenino.

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Reencuentro en el otro hemisferio

  El por qué estuvimos separados por cuatro meses no viene al caso, simplemente es un dato para que puedan imaginarse como nos sentíamos Mi Reina y yo separados por tanto tiempo. Para ambos fueron 120 noches de soledad, de dolor y tristezas, de recordar, llorar y añorar la compañía de nuestro compañero más amado.
  Ambos cambiamos mucho en este tiempo, aprendimos a valorarnos más y nos dimos cuenta que uno sin el otro no es otra cosa que un autómata hundido en una rutina vacía de aquellas cosas afectivas y placenteras que le dan verdadero sentido a la vida y nos hace sentirnos vivos, humanos y felices.
  Ninguno de los dos podía encontrar la justificación a la separación, ambos teníamos razones y motivos propios que nos ataron a lugares diferentes por aquellos días. Pero no podía ser que esas ataduras no se cortaran con la fuerza de nuestro amor. Por eso previamente a nuestro reencuentro, ambos sabíamos que uno de los iba a terminar cediendo.
  Desde que Mi Reina fijo fecha para el vuelo, yo sabia interiormente que a este esclavo ya no le quedaba mucha más libertad. Si bien es importante aclarar que una vez más había sido yo quien ahora no solo planteaba el cambio de roles, sino que aumentaba la apuesta y propuso comenzar una relación de FemDom.
  Mi Reina como es tan característico en ella, puso todos los NO y manifestó todos sus temores, yo haciendo trabajito de hormiga, nuevamente le mandé material de Internet para que se instruyera, manuales, relatos y las experiencias de otros matrimonios. Por suerte con cada carta y cada artículo que le mandaba, en ella se fue haciendo más a la idea de que encajamos perfectamente en los cánones del FemDom.
  Yo ya había tenido pruebas suficientes que ella no nació para ser sumisa, muy por el contrario gran parte de su vida vivió oprimida y necesitaba liberar su Domina interior y ser la leona que siempre soñó ser. A mí también me pasó algo por el estilo, pero en sentido inverso, toda mi vida fui un rebelde, un renegado y creía que era un buen momento para que alguien me ponga en caja y Mi Reina ya había mostrado varias señales que le sobraba talento para hacerlo.
  Interiormente ambos sabemos que el FemDom es un canalizador súper importante para que en la fantasía logremos experimentar lo que no podemos o nos cuesta ser en la vida cotidiana, que nos da la posibilidad de lograr un hermoso equilibrio entre el mundo real y el mundo de los sueños y las fantasías. Así fue que poco a poco cada uno se fue tratando de amoldar a su nuevo personaje interior. Cada correo que nos mandábamos era una demanda de lo que cada uno quería y de los elementos de tortura necesarios (en realidad placer), del vestuario, de la escenografía, etc.
  Ambos con mucho esmero fuimos poniendo lo que a cada uno le correspondía, yo ya tenía listo mi humilde departamento como si fuera un palacio, traté de cuidar hasta el último detalle, para que ella comprobara que además de ser un buen esposo y amante, puedo serle un muy buen sirviente.
  Así llegamos al tan ansiado día del reencuentro en el aeropuerto. Ella se había cortado el pelo bien cortito, que por cierto le queda muy, muy lindo y fortalecía esta nueva faceta de su personalidad, nos dimos un beso tan intenso y un abrazo tan sentido que jamás lo olvidaré.
  Llegamos al departamento y no pasó un minuto que empezamos a besarnos con locura y a franelearnos. Ya estaba pactado que las dos primeras veces que hiciéramos el amor sería todo muy vainilla, para lograr relajarnos, conversar y decirnos personalmente todas las cosas que teníamos reservadas en el corazón por tanto tiempo.
  La primera función de FemDom para ambos, sería después de la cena. Ella ya había seleccionado la indumentaria para la ocasión, iba a estrenar el corset de cuero que le había comprado, medias, portaligas y por supuesto botas. Mi Reina ahora se veía como una Diosa inalcanzable.
  Luego de que la hubiera ayudado a vestirse y que todo estuviera en su lugar, me mandó desnudarme por completo y decidió comenzar a depilarme todo, incluso mis genitales, mi pecho y axilas. Todo esto se hizo en la ducha y con espuma de afeitar. Terminada mi depilación me ordenó ducharme para sacarme toda la espuma y el bello que había quedado pegado en el cuerpo.
  Cuando salí de la ducha Mi Reina ya era otra mujer, me mandó secarme y luego desnudo tuve que besarle sus botas, luego fuimos hasta el colchón que estaba en el piso y ahí le tuve practicar sexo oral por un tiempo bastante largo, hasta que logró acabar. Eso es algo que a mí me apasiona. Para mi, su sabor es uno de los manjares más deliciosos que puede haber y por suerte, según ella cada vez lo hago mejor. Que lo diga ella, es todo un gran honor para este humilde servidor.
  Después fue mi turno, me vendó los ojos de manera tal que no pudiera ver nada, me mando ponerme panza abajo y con sus manos comenzó a hacerme un delicioso masaje que comenzaba por la espalda y bajaba prestando especial atención a mi cola, como si fuera una escultora buscando inspiración antes de comenzar su obra de arte. Se mostraba afectiva en sus caricias, pero habían largos silencios, lo que hacia que la adrenalina comenzara a sentirse cada vez con más intensidad. Hasta que me dijo: "¿Realmente estás dispuesto a complacerme y regalarme tu colita?" – "Si mi amor", es todo tuyo le respondí. Eso se convirtió en la señal de partida para ella.
  Uno a uno comenzaron a desfilar los distintos dilatadores anales. Los más chiquitos primero y después los más respetables, con cada uno se tomó su tiempo, hasta que ella no sentía que entraran y salieran sin ninguna dificultad no pasaba al siguiente.
  Pasó un largo tiempo jugando con todos hasta que a su criterio ya lo considero lo suficiente bien dilato. Sería el turno del Dildo Azul, un juguete bastante respetable y que ya me lo había hecho probar por Skype después de haberlo comprado. Con el dildo en su lugar me sacó las vendas y me mando cogerla, al altar de Mi Reina estaba sumamente húmedo y caliente, como pocas veces lo había sentido, con sus movimientos podía comprobar que también estaba hambriento. Y estaba yo, atendiendo con esmero a Mi Reina mientras tenía un dildo en mi culo. "Todavía no acabes" me ordenó "que tengo más para vos".
  Llegó el debút del nuevo arnés; El más largo y grueso de todos los que tenemos. En el primer día Mi Reina estaba dispuesta a darme con todo, me mando chuparselo y luego ponerme en cuatro. Estaba muy deseosa y dispuesta a usarlo, porque esta vez en ningún momento me quiso consultar nada. Se notaba que yo no tenía salvación, ni escapatoria a pesar de no estar atado.
  Me saco el dildo, lo volvió a meter un par de veces más y luego comprobó que eran casi del mismo diámetro que la pija imponente de su arnés, pero con la diferencia que el dildo tiene menos de la mitad de largo y es cónico. Me hizo sentir la cabeza de su flamante pija y me la saco, puso un poco de lubricante y de nuevo embistió un poco más adentro, la sacó nuevamente puso lubricante y repitió la misma operación.
  Todo lo hacía con mucho cuidado, porque cuando la sacaba, un par de veces sentí que revisaba la zona de trabajo cerciorándose que todo estuviera bien. "¿Te la querés comer toda esta noche o lo dejamos para más adelante?" Me pregunto. Por fin mostró algo de humanidad y compasión para conmigo. Pero ambos estábamos tan excitados que no pude responderle y moviendo mi culo hacia ella, como queriéndome meter yo mismo su pija más adentro, se dio cuenta que mi respuesta era afirmativa. Entonces me tomó con firmeza de la cintura, como buscando anclaje y desde donde yo había llegado, ella se aseguro de que entrara toda. "Ya está toda adentro" Me dijo y como yo no daba crédito a sus palabras, me hizo comprobarlo con mis propias manos.
  Luego de mi comprobación me la sacó y me dijo "Ahora te toca a vos, quiero que me des duro, duro y me llenes toda". Se imaginaran que sus deseos son órdenes para mí y al no poder ser de otra manera, cumplí.
  En lo personal, yo no podía creer, que en el primer día de los doce que iba a estar conmigo, ya me había presentado al más grande de todos sus amigos.
  Cuando se desata, es “Mi Reina” y la amo por todo eso que me hace sentir.-

domingo, 24 de noviembre de 2013

Mi primera experiencia FemDom

  Como ya algunos sabrán, mi nombre en nuestras fantasías es “Mío” y he decido relatar como junto a “Mi Reina” nos fuimos involucrando en los juegos de cambios de rol o mejor dicho FemDom.
  En nuestro caso, como en muchos otros que he leído por ahí, la propuesta salió de mi parte. Hacía bastante tiempo que tenía entre mis películas XXX una titulada “Las Chicas Atacan” (su título original en inglés es “Strap Attack 5”). Por un par de años fue la única película que tenía de ese estilo y no recuerdo bien cómo llegó a mi colección. Lo que sí, nunca la había compartido con “Mi Reina”, porque no se había dado la oportunidad y si bien a ella le gustan las pornos, a veces tiene muchos prejuicios al momento de verlas. Es decir que veiamos películas más bien light y lo máximo que se permitía ver eran escenas de “sexo anal”, es más, diria que eran las escenas que más le gustaban.    
  Conociéndola descontrolada cuando algo le gusta, no voy a negar que tenía miedo de proponer algo que a ella le gustara y yo después no pudiera acompañarla. De todas maneras la idea ya me quedó dando vueltas por la cabeza por varios días.
  Así llegamos a un fin de semana que los chicos tenían otro programa y no iban a estar en casa hasta el domingo a la noche. Era el fin de semana apropiado para tirarme a la pileta; ya que ambos íbamos a estar relajados y tranquilos, con tiempo de sobra como para que todo saliera muy bien. Ambos sabíamos que esa noche de sábado de fines de agosto del 2012 sería especial, pero yo tenía muchas más expectativas que ella. Así fue que prepare el reproductor en el dormitorio, trate de dejar algunos juguetes a mano que por lo general eran para ella, salvo el arnés que desde el Swinger que no lo habíamos sacado de nuestra "Cajita Feliz".
  Entonces la espere en la cama lo más tranquilo posible hasta que saliera de la ducha. Cuando vino al dormitorio, le dije: “Esta noche que estamos solos me parece ideal para que veamos una peliculita ¿Qué te parece?” Ella sin ninguna clase de reparos accedió, pensando que sería igual a las que habíamos visto. La primera escena un poco me jugó en contra, porque arranca con dos chicas con los arneses colocados y se pensó que era una lésbica. Por lo que demostró poco interés, habíamos quedado en que el Swinger era pasado y no quería volver a estar con otra mujer. Traté de calmarla y que siguiera viendo, que lo mejor estaba por venir. Es ahí, cuando sacan a un sumiso de una envoltura en la que esta tirado sobre el piso.
  La cosa cambió y no pronunció más una sola palabra y se quedó atenta mirando como lo iban preparando al pobre muchacho para ser duramente penetrado hasta decir basta por esas hermosas señoritas.
  No sé si por la novedad o que fue, pero le pico la idea, entonces yo manifesté que estaba dispuesto a probar que se sentía, pero que necesitaba que ella estuviera de acuerdo. No muy convencida accedió, pero me pidió que paramos la película porque no le permitía concentrarse.
 Así fue que ella me pidió que me pusiera pecho arriba. Luego reclinó mis pies y empezó a masturbarme con una mano y con la otra iba acariciando mis nalgas. Empieza a deleitar a mi socio con su boca, una experta en ese arte, pero esta vez dejaba salir su saliba y con la mano la llevaba a la zona de mi agujero y con masajes trataba de relajarlo.
  Tomó el lubricante de la mesa de luz y lo untó en uno de sus dedos y lo puso a trabajar, luego el segundo y a cada rato me decía: “¿Te duele? Cuándo me digas basta yo paro”, mientras que yo realmente lo estaba disfrutando, era algo completamente nuevo para mí y ella lo estaba haciendo muy bien.
  Luego de que los dedos jugaran con cierta facilidad, ella considero que era el momento de pasar a los juguetes para ganar algo más de profundidad, eligió algunos de los que ya estaban preparados. Pero ya no tenía tanta paciencia, “Mi Reina” se había comenzado a excitar con la situación, se colocó el arnés y buscó penetrarme, yo en todo momento estuve panza arriba, ella me hizo sostener mis pies hacia atrás para que le ofreciera mi culo virgen. Me penetro poco a poco, muy suavemente, con mucho amor, pero a los pocos segundos ella acabo de una manera impresionante que le impidió seguir. Se recostó a mi lado y se lleno de sentimientos de culpa diciendo que no lo debería haber hecho, que me lastimó y cosas por el estilo.
  No puedo mentir y voy a reconocer que el único sentimiento o sensación que tenía, era la de haberme dejado con todas las ganas. Traté de buscarla, pero cuando ella acaba, necesitaba en aquellos tiempos estar tranquila un buen rato antes de poder continuar. Yo no aceptaba quedarme así, me había preparado más que bien y en el momento del plato principal me abandonó y para colmo me negaba el postre.
  Quedé mal y no pude evitar exteriorizarlo. Luego de unos minutos de ella verme mal, me buscó con esa boca maravillosa, que con solo acercarla a mi socio, él se despertó para ella. Me hizo un muy lindo pete, no le costó hacerme acabar, porque sus manos conocen perfectamente mi ritmo y ya no hay manera que pueda resistirme a darle mi leche cuando ella la quiere.
  Pero yo seguía como mal humorado, no me había dejado bien, me fui a dar un baño y sin mediar muchas más palabras, así nos habíamos dormimos. Para mí el sábado ya no había terminado como yo me lo había propuesto y sin sentido, eso me había puesto muy mal. Sé que todo esto suena muy egoísta y de sólo recordarlo me siento una mala persona, pero de contar algo diferente, estaría mintiendo.
  A la mañana siguiente nos despertamos muy tarde, un hermoso día de sol fue el marco para que comenzáramos a hablar más relajados y tranquilos de lo que pasó la noche anterior. Ambos ya estábamos muy bien y yo con mucha desilusión le dije “que había llegado a la conclusión de que las mujeres me habían mentido por años, porque el sexo anal no era algo doloroso”. No paraba de reírme por eso, porque me habían hecho la película por años que era algo casi insoportable y pensaba que cuando alguien me entregaba la cola, era como si me entregara el alma misma.
  Por la hora, decidimos saltar el desayuno y directamente pasamos a preparar el almuerzo. Ambos seguíamos de muy buen humor, hasta que “Mi Reina” seguramente por mis argumentos se sintió movilizada a intentarlo de nuevo y ese sería su postre.
  Esta vez arrancamos en el living, con la misma película pero en la siguiente escena, ahora sin detener la película empezó a jugar con sus manos y lubricantes, mientras me tenía a mí tendido en el sofá. Se notaba que buscaba instruirse con cada toma de la película. Sus manos ya no hacían movimientos suaves y lentos como la noche anterior, sino muy por el contrario eran movimientos más firmes y rápidos. Hasta que dijo “vamos para la pieza”.
  Se notaba claramente que “Mi Reina” esta vez no sería la de la noche anterior. Ahora si le tenía miedo porque durante toda la mañana estuve sobrador y canchero con ella. Una vez en la pieza, no usó juguetes, directamente se puso el arnés, le colocó nuestro consolador rojo y me ordenó ponerme en cuatro y mirando al espejo de la cabecera de la cama. Puso bastante lubricante en mi culo y en el consolador diciendo: “Vos querías que te coja, ahora vas a ver” sentenció. Fue muy suave al momento de introducirlo, lo sacaba y lo metía despacio, pero cada vez más adentro. Luego de un ratito así, ella se quedó quieta y me ordenó a mí moverme, para que sea yo quien haga el trabajo y me la metiera hasta el fondo. “¿Querés duro?” Me dijo, yo ya estaba entregado no me quedo otra que responder “Si mi amor”, entonces “Mi Reina” se comenzó a mover rápido, fuerte y adentro, me dio así un buen tiempo, yo mordía la almohada del dolor, pero el placer que me estaba dando era impresionante. Sin ella acabar la saco y me dijo “Ahora cogeme vos un poquito pero no acabes porque tengo algo más para vos”, yo obedecí y le di hasta que ella se dio cuenta que estaba por acabar, por eso me ordenó parar y recostarme panza arriba.
  Llegó el momento de mi gran prueba, conocer y sentir a “Su Amigo”, un vibrador de medidas considerables, sobre todo de diámetro, lo preparo con mucho lubricante, lo puso a funcionar y lo reemplazo en por el rojo que estaba en su arnés. Me hacía sentir la vibración en mi pene, en mis testículos y vino la pregunta que me tocaba en el orgullo: “¿Este te lo vas a bancar?” Que otra cosa podía responder, “Si mi amor”. Esta vez ya no podía emitir palabra, sentía como cada milímetro de “Su Amigo” me iba abriendo todo, con el agravante que es cabezón, pero también es cónico hacia atrás y bastante más ancho que la cabeza en su base.
  Lo sacaba y lo metía, cada vez más y más adentro, sus manos entre tanto me acariciaban la espalda o me marcaban surcos suaves con sus uñas. En un momento que ella se dio cuenta que ya estaba por decir basta, se detuvo, pero sin sacarlo. Entonces una vez más recurrió a su mano libre y comenzó a masturbarme, lo hacía muy bien y mi pene que estaba un poco relajado, comenzó nuevamente a erectarse. Así fue que logró distraerme de lo que me estaba haciendo en el culo. Ahí me dijo: “Relájate, solo falta muy poquito para comértelo todo” y así lo hizo. “Ya está, lo lograste, te felicito” fueron sus palabras. Yo súper excitado pedí cambiar de rol de nuevo, para poner las cosas en orden y le hice amor con gran locura. Lamentablemente yo había acabado antes que ella, esta vez yo me porte mal al no esperarla, pero seguí dentro de ella y moviéndome hasta que ella también logró tener su preciado orgasmo.
  Esos dos días, para mí, inolvidables, marcaron el comienzo de un nuevo camino en nuestra sexualidad de pareja. A “Mi Reina” le costó mucho superar sus culpas. Es el día de hoy, mucho tiempo después, que no puede manejar su personaje dentro de la fantasía sin mezclarlo con el de la realidad. Eso no le permite soltar y liberar su yo interior plenamente dentro de la fantasía, porque lo reprime, lo encierra, trata de anularlo y después estando en la realidad ve a la Dómina como su enemigo permanente. Pero por suerte la paciencia y la perseverancia van logrando día a día pequeños avances y cuando cierra la puerta del dormitorio con llave, ya tengo mucho más claro lo que me espera.-

viernes, 22 de noviembre de 2013

La noche de Aniversario que terminó en FemDom

  Voy a transmitir como primer relato una experiencia interesante que me contaron y ojalá a quienes visiten mi Blog les guste o les pueda servir.
  La historia se da dentro un matrimonio sin hijos. Después de un noviazgo sexualmente apagado, ya que el caballero tenía siempre problemas para dejar satisfecha a la dama, porque sufría de eyaculación precoz. Ella estaba convencida que con el matrimonio y la convivencia el problema se resolvería, pero lamentablemente eso no pasó.
  Resultó que en la noche del Tercer Aniversario ella tenía pensado sorprenderlo con una cena muy especial. Para la ocasión, había comprado un hermoso conjunto de lencería con portaligas negro que estaría cubierto con un sexy camisolín. La cena liviana, estaba pensada para ser servida a la luz de las velas aromáticas.
  Le llevó horas de trabajo crear la escena, luego vino el baño, el peinado y el maquillaje. Cuando sonó el teléfono y él avisaba que llegaría más tarde porque había recibido una invitación para jugar al fútbol con los amigos, accedió total sería solo un par de horas más y eso se podía sobrellevar viendo una película romántica o erótica que generaría más deseos. Pero nada más lejos de lo que sucedería.
  El equipo que perdiera el partido, pagaría las cervezas y después de las cervezas vinieron otros tragos, haciendo que aterrizara por su departamento cerca de la medianoche y borracho.
  Ella estalló de la bronca, se salió de las casillas, hubo gritos, insultos y descalificativos de toda clase. Lo que debería haber sido la noche soñada, concluyó en la pelea más fuerte que hayan tenido. Lo mandó a dormir al sofá del living y pensó seriamente en el divorcio.
  A él se le vino el mundo encima, realmente la situación fue un shock, reconoció al verla vestida tan sexy y la decoración, cuán importante era para ella la fecha del aniversario que él cambió por un partido de fútbol, se dio cuenta que no había valorado debidamente a la mujer de su vida. Automáticamente se puso de rodillas y suplicó para que no lo abandonara, que sin ella, él no valía nada y su vida no tendría sentido.
  Ella accedió a pensarlo, pero él por varios días tuvo que dormir en el sofá, mientras ella definiera como serían las cosas en el futuro y a las que él debería ajustarse. Mientras eso pasaba, él se volvió muy atento, mandaba mensaje, dejaba notas cariñosas pidiendo perdón y suplicaba por una nueva oportunidad.
  Fue la primera vez que ella se sintió fuerte y poderosa ante él. Eso la motivó a buscar información por Internet, lo que derivó en un sitio donde se trataba la "Dominación Femenina",  pasó horas leyendo y estudiando más el tema.
  Optó por no renunciar a su matrimonio, ni al amor por su marido, pero no estaba lista para volver a intimar con él todavía y sabía que él satisfacía sus necesidades masturbándose. Por eso lo primero fue ir a un Sex Shop y comprar un dispositivo de castidad que le impidiera masturbarse. Lo debía llevar día y noche. Dada la situación, no fue difícil para ella imponer las nuevas reglas.
  Lo segundo que él debió hacer fue aprender a practicar, de la manera que a ella le gustara, el Facesitting. Siguió visitando cada tanto, el mismo Sex Shop donde había comprado el dispositivo de castidad y en cada visita compraba algo, un consolador, un plug, un vibrador, etc.
  Un buen día se decidió por el arnés, los consoladores ya no serían para ella sola, sino que ahora definitivamente las cosas darían un giro de 180 grados. El ya había aprendido a satisfacerla muy bien con la boca, pero ella no se conformaba con eso, quería ir más allá y así fue que comenzó a penetrar a su hombre con su arnés consolador, lo que la hacía sentirse realmente dominante. Por fin, por primera vez después de muchos años de relación,  había logrado tener orgasmos increíbles. El antes acababa apenas la penetraba y su vida sexual era una pesadilla. Ahora ella gozaba locamente penetrando a su marido, controlaba sus eyaculaciones, le prohibía masturbarse y lo liberaba de su dispositivo solo cuando ella quería sentirse llena, sino lo ordeñaba. Todo, todo se ajustaba a su inventiva y como una noche ella había soñado con una cena de Aniversario Especial, ahora todos los momentos que ella quería eran especiales, controlaba sus horarios y sus tiempos.
  El seguía yendo a jugar a la pelota con sus amigos, no era rencorosa, pero siempre iba con el permiso de ella y debía volver a casa a la hora indicada y por ser una buena Dómina con él, el debía ser bien agradecido con ella y retribuir debidamente cada concesión.
  Lo siguiente que ella tenía en mente era convertirlo en un "cornudo consentido", nunca jamás había tenido una experiencia con un hombre dotado y se fantaseaba con conocer a alguien que supiera hacerlo bien realmente y sobre todo con mucho aguante. Ella se sentía con toda la autoridad y el derecho de Dómina para hacerlo, pero eso será historia de otro relato, cuando sepamos quien será el candidato...

martes, 19 de noviembre de 2013

Humor FemDom

Fue así cómo comenzó lo nuestro.-

Manual de Dominación Femenina - Parte 6



Dominación Femenina y BDSM
  Poner el BDSM y la Dominación Femenina en el mismo saco es una de las equivocaciones más comunes entre los que no se han parado mucho a pensar en ello. Son como el agua y el aceite, generalmente cada uno va por su lado, aunque si se les agita se mezclan temporalmente, volviendo cada uno a su estado al poco tiempo de dejar de agitar.
  Yo personalmente me declaro practicante de la Dominación Femenina, así empecé  y así continuo y por más que de vez en cuando mantenga también relaciones de puro BDSM, mis principios y mis convicciones pasan siempre por los métodos de enseñanza del FemDom.
  BDSM y FemDom están  bastante alejados el uno del otro en sus extremos, aunque es cierto que en su zona limítrofe se parezcan o se entremezclen bastante. Y en cuanto a los practicantes de cada una de estas modalidades se podría decir que las dos modalidades gozan de buena salud…..vamos, que están casi a la par. Pero yo he podido comprobar que para los amantes del BDSM el FemDom les suena a juego de niños, pero a poco que se averigüe podrás comprobar que el FemDom es la practica preferida en el entorno de la pareja estable, mientras que las relaciones BDSM se dan con mayor frecuencia en las relaciones esporádicas.
  Curiosamente, un sumiso que es educado en el FemDom, pasara muy fácilmente de la mano de su Ama a compaginar practicas de BDSM de una forma gradual en poco tiempo, pero en cambio a los practicantes de BDSM les cuesta horrores aprender la dedicación, los modos y las formas que exige el FemDom. ¿Y por qué pasa esto? El sumiso amante del FemDom centra su placer en complacer a su Ama, en consecuencia somos nosotras las receptoras de ese placer, disfrutamos de sus atenciones tanto personales como sexuales a nuestra manera y según nuestros dictados. En cambio el amante del BDSM ve su sexualidad en el entorno de una sesión dirigida a él, lo cual implica una dedicación por parte del Ama que si es de continuo puede llegar a desanimarle.
  Una relación de dominio y una de sumisión no se presentan de igual manera, también influye que el Dominante sea hombre o mujer, hombres y mujeres no tenemos las mismas necesidades ni parecidas, en el plano sexual somos las antípodas y en el FemDom no se olviden que somos nosotras las que cortamos el bacalao. Precisamente por eso el FemDom es la practica preferida por las mujeres, mientras que los hombres hacen un batí burrillo entre Dominación Masculina y BDSM.
  Personalmente pienso que hay una colisión de intereses entre el BDSM y la Dominación Femenina, sobre todo cuando esta relación se da en el seno de la pareja. Implantar este tipo de relación en la pareja, en la mayoría de los casos  dependerá mucho de la predisposición de la parte femenina y desde luego intentar meter a una mujer en las practicas de BDSM sin haber aprendido las técnicas del FemDom y sin haber comprobado en sus propias carnes las bondades que el FemDom tiene para nosotras, no nos llevara mas que al fracaso y al hastío, porque entre que nos hagan un masaje corporal, una sesión de manicura, una adoración de pies, un cepillado de pelo, arreglarnos el baño o una buena sesión de sexo oral que nos lleve al Olimpo del orgasmo y un mañana será otro día… A tener que pensar cada vez que deseamos sexo debemos montar un espectáculo que agrade a nuestro sumiso hay un trecho muy, muy grande ¿Se dan cuenta de eso?
  Las sesiones están bien y todo lo que tu quieras, pero de continuo como sucedería en el seno de la pareja es solo para unas pocas veces. Yo personalmente como ya he comentado empecé con la Dominación Femenina y continuo con ella, cuando lo creo oportuno y me apetece, realizo una sesión mixta con mi pareja sumisa así que yo por mi parte no tengo de que quejarme, pero lo he buscado yo, fue porque así lo he querido yo y porque el FemDom me ha dado esa libertad. Por eso les aconsejo a vosotras que no acepten la idea de que el BDSM es la entrada principal, en cambio si les recomiendo ir explorando las infinidades del FemDom, para luego intentar el BDSM si ambos así lo desean.

Los límites y su evolución
  En esta ocasión no voy a hablar de los típicos límites pactados por la pareja a la hora de acordar una sesión, porque entre otras cosas de esto ya hay mucho escrito.
  Los limites no son más que puntos de partida que sirven (y mucho) para una relación FemDom incipiente, pero en absoluto son inviolables en el transcurso del tiempo, si así fuese, menudo aburrimiento nos podríamos agarrar.
  La evolución en nuestros juegos forma parte de nuestra naturaleza humana y por lo tanto respetando la libertad de cada uno, esta deberá de ser acompasada  ya que de no ser así podría llegar la ruptura. Esta frase sacada de la película “Historia de O” define muy bien los límites de la persona frente a su subordinado y la necesidad de una evolución acompasada: “Ya ves lo que te hago si eres mía, y si eres mía, no puedes negarte, pero ya sabes que en todo momento puedes negarte a ser mía”. Ya ves que responde perfectamente la pregunta sobre si un Dominante puede hacer lo que desee con su sumiso. Por un lado los deseos de la Ama son indiscutibles y nuestro esclavo tendrá que obedecer sin cuestionar la naturaleza de estos, pero a su vez si nuestras decisiones atentan contra los valores del esclavo este, siempre podrá negarse a realizarlos.
  La libertad individual de cada una de las dos partes Dominante y sumisa nunca llega a perderse con lo que en todo momento se trata de un juego consensuado aunque siempre en constante evolución y evolucionar en estas relaciones es fundamental para derribar las barreras que nos impiden disfrutar plenamente de nuestras vivencias FemDom. Nosotras como Amas evolucionamos si nuestro sumiso también lo hace, normalmente es una evolución acompasada de los dos actores del juego.
  En la realidad diaria de una relación FemDom surgen a menudo diferencias en cuanto al diagnostico de la evolución que cada una de las partes hace del otro, esto evidencia distintos ritmos de evolución en lo que cada uno exige del otro. Aquí surge la pregunta ¿Quién es el que va fuera de compás? Y evidentemente bajo mi punto de vista es el sumiso quien suele ir fuera de compás con respecto a su Ama, tanto si presiona demasiado, como si se queda rezagado con respecto al ritmo de evolución que cada una de nosotras tiene.
  En mi caso, recuerdo que en mis comienzos, mi dominio se encajaba más a la ideas del FemDom domestico que al BDSM, pero con un nivel de castigos mas bien light, sin embargo ese nivel inicial ha ido evolucionando hacia formas mas severas de castigo, simple y llanamente porque es lo que mas me apetece, pero como cada sumiso es un mundo las formas light de dominio ya no son para mí y a esos hombres se los dejo a las zorritas nuevas que como es natural deben empezar también su entrenamiento desde cero.
  No es que sea mejor ni peor, simplemente que cada cosa tiene su tiempo, y en estos momentos prefiero esclavos con un buen nivel de aguante y dispuestos a soportar mis juegos por pura devoción hacia mi, yo les exijo cada vez más, pero no porque así lo pida el guión, si no porque mi cuerpo me lo pide y es lo que deseo y si nuestro esclavo no nos acompaña en nuestro camino evolutivo, seguramente tendremos un problema. El nunca debería ir por delante, pero tampoco debería ir muy detrás de nosotras.